Son muchos los motivos para escoger Portugal como destino vacacional durante cualquier época del año y aún más, si viajamos desde España. Además de su proximidad, nuestro vecino luso encierra una enorme variedad de secretos que merece la pena conocer.
La ciudad de Oporto ofrece un sinfín de atractivos arquitectónicos, artísticos y culturales al visitante. Sus espectacualres playa y sus pequeños pueblos, repartidos a lo largo de todo su territorio, son un magnífico reclamo para los amantes del turismo rural.
Tanto si buscas dejarte embaucar por el ambiente de una gran ciudad europea como si prefieres perderte en plena naturaleza, Portugal tiene un destino ideal para tus próximas vacaciones. Y sea cual sea tu elección, hay un factor común a lo largo de todas sus localidades que te seducirá desde el primer momento, su incomparable gastronomía. ¿Nos acompañas a través de un suculento paseo guiado por los principales platos típicos de Portugal?
Un recorrido por la deliciosa gastronomía portuguesa
Bacalhau
Si hay un alimento que tradicionalmente ha caracterizado a la cocina lusa, ese es sin duda, el bacalao. La tradición popular afirma que los portugueses elaboran mil recetas diferentes de este sabroso pescado, a lo largo de todo el país. El Bacalhau com Natas, el famoso Bolinho de Bacalhau o el Bacalhau à brás, son quizás los ejemplos de recetas más extendidas. Sin embargo, a lo largo de sus numerosas localidades rurales y también en los grandes restaurantes de sus ciudades, la variedad de recetas que puedes llegar a encontrar es casi infinita.
Sardinas
Pero la oferta culinaria portuguesa de platos de pescados frescos no se reduce solo al bacalao. El otro pescado característico del país son las sardinas, cuya fama y calidad las ha convertido en uno de los símbolos nacionales. De hecho, es muy común encontrarlas dibujadas sobre distintos tipos de souvenirs en cualquier tienda de regalos.
Mariscos frescos
Y por supuesto, a lo largo de todos sus pueblos costeros y sus grandes ciudades, los mariscos frescos son de una gran calidad y si buscas adecuadamente, es posible encontrarlos a muy buen precio en algunos restaurantes. Por ejemplo, las Ameijoas à Bulhao Pato son otro de sus platos característicos, especialmente en la zona del Algarve. Y la Cataplana portuguesa permite probar diferentes delicias del mar en un guiso que hará las delicias de los amantes del buen comer.
Leitao, bifanas, alheira y francesinha
En lo que respecta a la carne, la calidad y variedad de su oferta tampoco se queda corta. Desde el típico leitao, un cochinillo asado espectacular, hasta las famosas bifanas, un bocadillo compuesto por carne de cerdo adobada, que además de estar delicioso, hace las veces de tentempié ideal para aquellos viajeros que deseen disfrutar de un almuerzo rápido y continuar disfrutando del turismo.
En un formato parecido, aunque con ingredientes más variados, destaca también la famosa francesinha portuguesa, uno de los platos más populares de la ciudad de Oporto y cuya fama ha provocado que cada vez sea más común encontrarlo más allá de sus fronteras.
Como broche final de las carnes portuguesas, el embutido más característico de la gastronomía lusa es la alheira, compuesto por carne picada de diferentes tipos y pimentón.
Cocido a la portuguesa, caldo verde y feijoada
Ya pasando a los platos de cuchara, el cocido a la portuguesa es seguramente el guiso tradicional más característico. Su receta no es muy distinta de la de los cocidos españoles, combinando distintos tipos de carne y verduras para lograr un plato contundente a la par que delicioso.
El caldo verde es otro de los platos nacionales, además de una de las señas de identidad del casco viejo de Oporto, donde proveniente de las cocinas de sus tascas y tabernas, inunda sus pequeñas callejuelas de ese aroma tan característico.
Los amantes de la cuchara y los platos tradicionales tampoco pueden perderse la feijoada, especialmente si tienen la oportunidad de probarla en algún restaurante de esos de toda la vida, que se esconden en los pueblos del interior portugués. Se trata de una combinación de legumbres, carne y arroz, perfecta para reponer fuerzas después de una buena caminata turística.
Pastel de Belem
Para el postre, como no podría ser de otra manera, una buena copita de vino de Porto y un delicioso pastéis de nata o pastel de Belém, dos de los símbolos de Portugal y al mismo tiempo, dos delicias que no puedes dejar de probar si visitas cualquier punto del país.
Dónde alojarse en Portugal
Ya hemos comprobado que Portugal es todo un templo gastronómico a nivel internacional, pero para saborear todos estos manjares y conocer de primera mano sus numerosos atractivos, hay que vivirlo desde dentro.
Y qué mejor destino para hacerlo que la ciudad de Oporto. Basta un paseo por su Ribera al atardecer para comprender que se trata de uno de los enclaves con más encanto de todo el continente europeo.
Nuestra recomendación de alojamiento es el hotel Catalonia Porto, un hotel boutique de 4 estrellas que destaca por la calidad de sus servicios y la exclusividad y comodidad de sus instalaciones.
Ubicado sobre un conjunto de edificios históricos que datan del siglo XVIII, su fachada contrasta con la modernidad de sus habitaciones, decoradas con motivos portenses y diseñadas al milímetro para procurar la comodidad de sus huéspedes. Se ubica muy próximo a la famosa Plaza Batalha y a la estación de tren, en pleno corazón de la ciudad.
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